No puedo evitar emocionarme profundamente cuando veo una muestra de Amor.
Y el sismo de ayer, no solamente movió la tierra y la cimbró, también lo hizo con la conciencia, la generosidad, el altruismo, la necesidad de dar y ayudar que finalmente, se traduce en amor del ser por el ser.
Me conmueve en demasía ver el apoyo incondicional y el espíritu de lucha y entrega de todos los involucrados. De la misma manera en que cuando ocurre el evento, a la mente y al sentir llega la gente a la que amas y es inevitable querer estar en contacto y preguntar, dada la angustia ¿Estás bien? ¿Todo bien? Aunque de igual forma, notas a quién no le interesas.
En breves instantes, notamos cuan frágil es la vida y que faltan perdones por dar, disculpas por ofrecer, palabras por decir, abrazos por dar, amor por compartir. Por eso, a ti te digo hoy, TE AMO.
Mi admiración y reconocimiento a los hermosos seres que están apoyando y tengo el privilegio de decir que amigos míos, están en algún lugar dando apoyo físico, emocional (con terapias), médico y ofreciendo sus hogares. Bendita la luz de todos ustedes y bendiciones multiplicadas de regreso.
Creo que más de uno, hemos llorado al ver las imágenes, videos, escuchar como vivieron el suceso personas cercanas. Sentimos empatia por las pérdidas, oramos, rezamos, donamos. Eso, también es amor.
Somos uno, la tierra lanzó el grito y la respuesta no se hizo esperar. El Himno Nacional da la razón: "un soldado en cada hijo te dio".
" ¡Patria! ¡Patria! tus hijos te juran
exhalar en tus aras su aliento,
si el clarín con su bélico acento
nos convoca a lidiar con valor.
¡para ti las guirnaldas de oliva!
¡un recuerdo para ellos de gloria!
¡un laurel para ti de victoria!
¡un sepulcro para ellos de honor!"
No hay comentarios.:
Publicar un comentario